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Biografía del artista Ivan Aivazovsky – técnicas y obras

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¿Quién fue el artista Ivan Aivazovsky?

Aivazovsky es uno de los artistas más fascinantes y más talentosos de los últimos dos siglos. Ivan Aivazovsky es mucho más conocido por pintar paisajes magníficos y es considerado entre los mejores en esta categoría, quizás «el mejor» de toda la historia. Seguidamente le presentamos la biografía de este talentoso pintor ruso.

Ivan Aivazovsky era un famoso artista ruso especializado en retratos del paisaje marino y el paisaje en general. Nació en la familia de un comerciante armenio indigente en la ciudad de Crimea de Feodosia. En el momento del nacimiento de Aivazovsky la ciudad quedó devastada después de una guerra  y todavía estaba sufriendo las consecuencias de una epidemia de peste que había afectado la región en 1812. Por lo tanto, la infancia de Aivazovsky transcurrió en la pobreza frente a la hermosa bahía de Feodosia y las ruinas de una antigua fortaleza griega. El joven Iván estuvo fascinado por la grandeza de la visión y las historias heroicas sobre los griegos y las famosas batallas del pasado.

Biografías de artistas y sus principales obras

Su talento fue descubierto a una edad muy temprana. Fue contratado como aprendiz por un arquitecto local y enviado más adelante a un gimnasio en Simferopol, donde expuso estas increíbles habilidades artísticas influyentes de la localidad, que le ayudaron enormemente en su desarrollo como pintor.

¿Cómo se desarrolló la vida y obra de Ivan Aivazovsky?

Aivazovsky se mudó a San Petersburgo para entrar en la Academia de arte. Su primer éxito llegó en 1835 cuando su bosquejo «Aire sobre el mar» recibió una medalla de plata en un concurso de arte. Fue en este momento que Aivazovsky conoció a  varios pintores contemporáneos tales como Mikhail Glinka, Vissarion Belinsky, entre otros.

En 1836 el artista francés Philippe Tanner llegó a enseñar en la Academia y notó a los jóvenes prometedores. Tanner era un maestro de pinturas marinas y demostró a Aivazovsky sus trucos. En el otoño de ese mismo año Aivazovsky puso en exhibición cinco de sus propios lienzos marinos. El artista fue notado por la prensa y los críticos. Al año siguiente fue galardonado con una medalla de oro por su obra «Bahía de Finlandia» y «Las carreteras cerca de Kronstadt» recibiendo el título oficial de artista.

Aivazovsky fue seleccionado por la academia para continuar su trabajo y se trasladó de nuevo a Crimea donde colocó una tienda y empezó a pintar al mar negro. Hizo la mayor parte de su pintura en los exteriores, viendo los elementos y sólo va al interior para dar los últimos toques a sus obras maestras. En 1839 Aivazovsky participó en una operación armada en las costas del caucásico, tuvo encuentros con destacados almirantes del tiempo, convirtiéndolos en sus amigos de por vida.  El ataque inspiró una serie de pinturas de batalla y valor del artista, que le valió mucho respeto en la marina de guerra y una buena reputación entre los oficiales. Sus lienzos representando batallas navales son extraordinariamente verdaderas narrativas del hecho y están llenos de información precisa que pueden ser considerados ilustraciones de tácticas de ataque naval.

A su regreso a Rusia Ivan Aivazovsky recibió un título oficial dentro de la Oficina Naval de General que más tarde le permitió unirse a expediciones de investigación y ciencia rusa a Turquía, Grecia, Egipto, América y Asia para traer a casa más impresiones marinas y cientos de bocetos que se reflejan en sus más famosas obras de arte.

En 1846 Aivazovsky construyó su propio taller en su natal Feodosia y pasó la mayor parte de su tiempo allí, detrás de puertas cerradas, produciendo una imagen tras otra. Ya no necesitaba ir al aire libre para inspiración, ya que había visto gran parte de su entorno para producir lienzos con velocidad asombrosa. En este momento el artista había perfeccionado su técnica e inventado tantos trucos que asombró a menudo sus visitantes creando un lienzo grande en cuestión de horas.

Su vida en la tranquila costa Feodosia fue bastante sin incidentes. Pasó días en su taller de pinturas de mezcla y producción de paisajes marinos y en invierno fue a San Petersburgo para exponer al público sofisticado de la capital rusa.

¿Cuál es la importancia que tiene la obra de Ivan Aivazovsky?

Su arte fue influenciado por el romanticismo, sus batallas en cuadros como «La batalla de Chesmen» (1848), se llena con «la música de la guerra,» luchar contra el pathos heroico del mar. A primera vista esta pintura da la impresión de una gran fiesta con celebraciones y fuegos artificiales, sólo después de un examen más detenido se hace evidente que es una batalla en el mar negro por la noche, con la flota turca ardiente y una nave en la oscuridad. Igualmente, entre las piezas dispersas de la formidable Armada, el buque insignia de la Armada rusa, se encuentra una sombra oscura y un bote con la tripulación sobreviviente listo para atracar después de haber explotado su bote de fuego para destruir al enemigo.

En 1868 Aivazovsky viajó a las montañas caucásicas y pinta los arrecifes con sus ventisqueros blancos nacarados, como olas de piedra. Una serie de pinturas del sur del Cáucaso es reconocida como obras maestras.

¿Cuáles son las técnicas más usadas por Ivan Aivazovsky?

Desde su infancia observó la naturaleza. Así mismo este pintor tenía una memoria muy buena, por lo que él podría repetir melodías sin educación musical. Así que él utilizó este talento como artista, ya que era un artista de estudio, siempre trabajando en el interior, a veces hizo algunos bocetos. Sin embargo pasaba mucho tiempo observando la naturaleza, amaneceres, puestas de sol y los océanos. Tomaba su  cuaderno y dibuja tres líneas: una para el horizonte y dos para las olas. Pasaba tiempo en el exterior para memorizar la luz que necesitaba. En la tarde empezaba a trabajar en el estudio y al día siguiente la pintura estaba lista.

¿Cuáles son las obras más importantes de Ivan Aivazovsky?

Las obras de arte a continuación son los más importantes de Aivazovsky, que  resumen los principales períodos creativos y destacan los mayores logros del artista.

-La novena ola (1950)

Esta obra maestra de Aivazovsky, representa un amanecer después de una tormenta de la noche, los primeros rayos de luz tocan la superficie del océano embravecido y la temible novena onda está lista para aplastar a un pequeño grupo de personas que luchan por sus vidas entre los escombros. Aunque la situación parece desesperada, la imagen deja al espectador con una luz de esperanza tiene lleno de luz desde el sol naciente trae otro día.

-Mar Tormentoso

Ivan Aivazovsky siempre fue un maestro del «mar tempestuoso». Siempre salía una especie de «rayo de esperanza» en estas pinturas. Podía ser la luz de las nubes o tal vez el color de la composición que la hacía no tan trágica pero que al mismo tiempo ofrecía  una especie de optimismo. Igualmente, Aivazovsky podía representar la furia del mar como nadie.

-Neblina de la Mañana

Al ser un maestro de la tormenta se dio cuenta que la otra cara de la moneda era la calma y la tranquilidad que podía ser mejor expresada en paisajes de la mañana. Observando tales pinturas casi se puede  sentir el aire y la niebla del lienzo.

-Vista de Constantinopla y el Bósforo

Esta obra es de la corriente del romanticismo y se presenta en ricos colores e iluminación establecida  del ambiente.

-La Novena Onda

El título se refiere a una antigua expresión, a una ola de tamaño increíble que viene después de una sucesión de ondas de forma incrementada a más grandes. Representa un mar después de una tormenta de la noche y frente a la muerte tratando de salvarse a sí mismos aferrándose a los restos de una nave naufragada. Los escombros, en la forma de la cruz, parece ser una metáfora cristiana para la salvación del pecado terrenal.

Si usted requiere mayor información, entre al espacio: Tipos de Arte, en Pintores Rusos.

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