¿Qué es el aforismo?
El aforismo se refiere a un tipo de enunciado de carácter sentencioso del que es posible conocer su origen, dado que ha sido una de las expresiones de la literatura oral que se ha mantenido vigente a lo largo de las generaciones, y se ha modificado o bien ha dado origen a estas manifestaciones que se han registrado de manera escrita.
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Se caracteriza por ser resultado de la experiencia y por tener un sentido culto en el que se expresa el grado de conocimiento que tiene el autor, así como también el uso preferente culto y el alto grado de fijación interna que puede reflejar. Es así que en la actualidad es posible conocer una gran variedad de aforismos que son atribuidos a importantes personajes de la historia, reales o ficticios y en los que es posible encontrar literatos, filósofos, entre otros.
Características principales del aforismo
Pasemos a ver una serie de aspectos y rasgos distintivos de este tipo de expresión que nos van a permitir distinguirlo de otras manifestaciones en la tradición literaria. Estos rasgos son:
Intención del aforismo
En primer lugar, tenemos el objetivo o la finalidad del aforismo. En este caso, esta expresión oral se convierte en una declaración, de ahí su carácter sentencial, en el que se da a conocer un principio de manera concreta, coherente y directa hacia un público o un lector. Se caracteriza porque este tipo de declaración se presenta aparentemente como definitiva.
Usos complementarios
Además de la implicación sentencial, el aforismo ha sido usado a lo largo de la historia como un recurso complementario a la manifestación de pensamientos, especialmente, de manera que distintos tipos de registros desarrollados, en particular en la Grecia Clásica, contienen elementos aforísticos con los cuales se busca sustentar las teorías, demostraciones y demás ideas. Algunos de los autores que usaron el aforismo como recurso para ello fueron Hipócrates, Demócrito, Heráclito de Éfeso, Esquilo, Píndaro, entre otros.
Sin embargo, se sabe que también a lo largo de la literatura y la filosofía, el uso del aforismo fue muy frecuente no solo en autores de esta época, sino también en muchos que dejarán importantes obras en la posteridad.
Resultado de la experiencia
Uno de los ejes clave que nos permite distinguir el aforismo de otras formas de expresión oral y literaria, tiene que ver con que el aforismo es fruto de la experiencia de forma directa. De esta manera, la manifestación, procedente de la experiencia, puede usarse en una gran variedad de campos, en especial y la mayoría de las veces en espacios donde no se aplica el método científico.
Pilares del aforismo
Entre los elementos más importantes de este tipo de expresiones resaltan tres pilares fundamentales. De un lado está la concisión a través de la cual las palabras que se usan son capaces de expresar las ideas “determinantes” de lo que se quiere decir. En segundo lugar está la brevedad, dado que el aforismo es una expresión considerablemente corta y luego tenemos la coherencia, a través de la cual las palabras usadas siguen una idea que puede aplicarse e interpretarse de forma correcta en diversas situaciones.
Disipación de la duda
El aforismo se presenta como una expresión, idea o pensamiento “definitivo”. En este sentido, cuando se enuncia, no hay espacio posible para dudar acerca de lo que se emite a través de la valoración o la idea, no genera inquietud frente a lo que quiere decir y por ello se concibe como un hecho de que así es o debe ser.
Sobre la verdad
Es importante considerar que si bien el aforismo se presenta como una verdad, no necesariamente corresponde a una verdad absoluta, siendo este aspecto de la verdad uno de sus objetivos. De hecho, es posible que lo que señala un aforismo no necesariamente ocurra o corresponda con la verdad de lo que sucede en determinada circunstancia. La idea puede ser cuestionada por quien la escucha o lee.
Tipos de aforismos
De acuerdo al contenido del aforismo, así como su procedencia e incluso su intención, es posible identificar una gran variedad de aforismos. Entre ellos encontramos los siguientes:
Aforismo ético
Es un tipo de aforismo que contiene un sentido moral y ético en el que se establece un tipo de conducta considerado correcto o bien se condena un comportamiento en específico. Es un tipo de aforismo genérico en el que quien escucha, debe identificar la falta, corregir su acción o bien atender el consejo que se le enuncia.
Aforismo profesional
También llamado aforismo de origen científico o simplemente aforismo científico, se refiere a un enunciado sentencioso que procede de un campo del saber en particular, ya sea científico, técnico o profesional, razón por la que se le asocia con este tipo de espacios. A menudo se denomina principio, ley o postulado, dependiendo del ambiente en el que se enuncie.
Aforismo político
Este tipo de aforismo encierra una doctrina o aspecto en relación con la política, de modo que puede resumir una ideología, por ejemplo. Gran parte de las veces el aforismo político dependerá del contexto en el que se use, dado que en algunos casos es posible encontrar enunciados muy similares al aforismo ético.
Ejemplo de aforismo
Como mencionamos, el aforismo, procedente del entorno experiencial, tiene la facultad de aplicarse en una gran variedad de espacios. Un ejemplo de aforismo es el que se presenta a continuación:
Lo que no me mata, me fortalece.
Seguramente es un aforismo que hemos escuchado con frecuencia. Indica cómo a lo largo de distintas dificultades u obstáculos, aquello que resulta complejo y en muchos casos hiriente, es capaz de fortalecer, reforzar y nutrir la experiencia, el aprendizaje y con ello, consigue preparar al ser humano de acuerdo a la situación.
Para conocer más acerca de otros tipos de literatura oral, en nuestra sección dedicada a este campo encontrarás una lista con todas las expresiones de la tradición oral. Asimismo estará una sección dedicada al campo artístico donde podrás conocer mucho más del mundo de la literatura.