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Los Pintores Españoles más Famosos

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Pintores Españoles más destacados

En la historia del arte de España, sus pintores son de los más resaltantes del mundo.  Ya que este país ha generado un gran número de artistas pintores, por lo que, resulta complejo elegir y destacar los que pudieran ser resaltados como los mejores. Por lo tanto, se ha intentado hacer una compilación de los pintores españoles más famosos de la historia y sus obras más importantes. Por lo que, a continuación se realiza una síntesis de cada uno de ellos:

El Greco (1541-1614), obra pictórica

La técnica de este pintor terminó influyendo en los pintores impresionistas. Comenzando su carrera en Venecia, el Greco, fue luego a  Roma y finalmente se estableció en Toledo. Igualmente, realizó una diversa obra pictórica encontrándose entre ellas, muchas obras religiosas, retratos de nobles y escenas de Toledo. Siendo El Entierro del Conde de Orgaz uno de sus cuadros más conocidos. El tiempo de residencia del Greco en Italia, fue de unos diez años donde se transformó en un pintor renacentista, asumiendo ampliamente el estilo de Tiziano, después en Roma, estuvo en contacto con el manierismo de Miguel Ángel. En 1577 una vez en Toledo, vivió y trabajó allí el resto de su vida. Durante los 37 años de vida en Toledo, su arte evoluciona grandemente. En las primeras etapas, su inspiración proviene de fuentes italianas. Sin embargo en el 1600, se muestran más intensamente los elementos artificiales e irreales de sus obras, específicamente los  antinaturalistas y neoplatónicos.

José de Ribera (1591-1652),  estilo naturalista.

Este pintor español desarrolló muchas de sus pinturas en Italia. En este país adquirió gran fama por  su dominio del estilo naturalista. Dado que era físicamente de baja estatura, en Italia recibió el apodo  “El españolito“.  A pesar de haber pasado mucho tiempo en Italia, nunca olvidó sus raíces españolas. También fue identificado porque firmaba muchos de sus cuadros como “Jusepe de Ribera, español”. Las obras que más destacan de este pintor son: ‘La Inmaculada Concepción’, ‘Sileno borracho’, ‘San Andrés’ o ‘San Pedro’.

Francisco de Zurbarán (1598-1664),  época del Barroco

Este pintor se hace muy popular en  la época del Barroco y la Contrarreforma, con debido a sus cuadros religiosos y escenas de la vida monástica. Tenía un estilo que mantuvo por décadas, y se caracterizó por ser un pintor tenebrista, debido a que realizaba contrastes de luz y sombras.  En sus obras destacan las pinceladas sencillas, realistas, detallista, con formas amplias y los volúmenes, tenían la influencia de Caravaggio, José Ribera y Diego Velázquez. Por lo que,  al final de su carrera, fue tomando el estilo más sutil de Murillo.

Diego Velázquez(1599-1660), temas religiosos

A la edad de 11 años, este pintor comenzó un aprendizaje de seis años con el pintor Francisco Pacheco. Las primeras obras de Velázquez fueron de los temas religiosos tradicionales favorecidos por su maestro, pero también llegó a ser influenciado por el naturalismo del pintor italiano Caravaggio. Velázquez estableció su propio estudio después de terminar su aprendizaje en 1617. Un año más tarde, se casó con la hija de Pacheco, Juana, la pareja tuvo dos hijas.  Igualmente, en 1622, Velázquez se traslada a Madrid, donde, gracias a las conexiones de su padre, obtuvo la oportunidad de pintar un retrato del poderoso Conde-Duque de Olivares. El Conde Duque recomienda entonces los servicios de Velázquez al Rey Philip IV; al ver un retrato terminado, el joven rey de España decidió que nadie más lo pintaría y nombró a Velázquez, uno de sus pintores de corte.

Bartolomé Esteban Murillo (1617-1682), pintura barroca

Este pintor nació en Sevilla  y se considera uno de los máximos representantes de la pintura barroca española. Sin embargo, se cree que decayó en valoración a principios del siglo XX.  No obstante, vuelve a renovarse el interés por este pintor llegando a tener un importante reconocimiento mundial.  En sus obras resalta su estilo barroco muy detallado llegándose a valorar en sus pinturas una tendencia hacia el rococó. En 1630 trabajaba como pintor independiente en Sevilla, recibiendo en 1645 su primer encargo con una serie de lienzos ordenados por el claustro de San Francisco el Grande.  Así la serie está compuesta de trece cuadros, dentro de los cuales se encuentra la obra titulada: La cocina de los ángeles, que fue la más celebrada del conjunto por la minuciosidad y el realismo con el que fueron tratados los objetos cotidianos. Posteriormente, pintó dos grandes lienzos para la catedral de Sevilla, especializándose en dos temas iconográficos muy relacionados con su personalidad artística: la Virgen con el Niño y la Inmaculada Concepción. Haciendo varias versiones de los mismos. Igualmente, sus vírgenes son siempre mujeres jóvenes y dulces, de las que  seguramente le sirvieron de inspiración las sevillanas conocidas  por el artista.

Francisco de Goya (1746-1828), retratista

Pintor grabador Español. Goya era hijo de un Florín, y pasó parte de su juventud en Zaragoza. Allí comenzó a estudiar pintura en la edad de catorce años. Fue alumno de José Luzán Martínez. En primer lugar, Goya aprendió  por imitación. Él copió las obras de grandes maestros, encontrando inspiración en las obras de artistas como Diego Rodríguez de Silva, Velázquez y Rembrandt van Rijn.  Trató de seguir su educación de arte en 1770 y 1771 al viajar a Italia. En Roma, Goya estudió las obras clásicas. Presentó un cuadro a un concurso realizado por la Academia de Bellas Artes de Parma. Mientras que los jueces le gustaba su trabajo, él no pudo ganar el primer premio.

En 1779, Goya ganó un nombramiento como pintor de la corte real. Continuó aumentando su prestigio, recibiendo ingresos de la Real Academia de San Fernando. Igualmente, Goya comenzó a establecer una reputación como retratista, ganando comisiones de muchos  círculos reales. Obras, como «El duque y Duquesa de Osuna y sus hijos» (1787-1788), ilustran el ojo de Goya para el detalle.

Joaquín Sorolla (1863-1923), impresionista

Este pintor desde que era muy pequeño demostró una verdadera vocación por la pintura. Se cree que su estilo es luminista aunque no ha sido fácil ubicarlo dentro de un estilo determinado, algunos críticos de arte siempre lo han calificado como impresionista. Este pintor llegó a realizar la mayoría de sus obras al aire libre. Dominando con gran destreza la luz y sus cuadros representan escenas cotidianas y paisajísticas de la vida mediterránea. También cultivó la pintura de denuncia social con muchos éxito. Se hizo famoso en el plano internacional luego de celebrar una exposición en París con múltiples obras, consiguiendo que se conociera su obra pictórica por toda Europa y América. También expuso en Nueva York en 1909 y cosechó mucho éxito. Realizó por encargo para la Hispanic Society of America catorce murales que fueron colocados en las diferentes salas de la institución.  Estos murales llevan el nombre de Visión de España, en los que se representaban escenas típicas de diversas provincias tanto españolas como portuguesas. También realizó varios retratos de figuras importantes como fueron Juan Ramón Jiménez, el rey Alfonso XIII, Vicente Blasco Ibáñez y Ortega y Gasset entre otros. Por lo que, a Sorolla se le considera uno de los pintores, con más obras realizadas, ya que se encuentran unas  2.200 obras catalogadas.

Federico Madrazo (1885-1894), pintor neoclásico

Este pintor nació de un padre pintor neoclásico, José Madrazo, y de Isabel Kuntz Valentini, también hija del pintor polaco Tadeusz Kuntz. Por lo que, Madrazo estudió en la escuela de Alberto Lista, en Madrid, y en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Tal vez una de sus primeras obras titulada La continencia de Escipión  le sirvió de gran mérito para el ingreso en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando a la edad de diecinueve años. Posteriormente, se fue pensionado a París para estudiar pintura con Ingres, amigo de su padre. De esta escuela adquirió el estilo romántico a la manera francesa. Luego, tras permanecer por dos años en Roma, regresó a España, y es a partir de 1842 cuando desarrolla una intensa labor artística y docente, rodeado de algunos artistas que también se habían formado en Francia e Italia, como él, entre los que destaca el maestro catalán Joaquín Espalter. Alcanzó gran popularidad, siendo uno de los principales representantes del romanticismo, llegando a ser el pintor de cámara de Isabel II. De igual manera, Federico Madrazo se destacó en el ámbito de los retratos, considerado uno de los grandes maestros de su país. Pintó retratos para la alta sociedad y la monarquía. Entre sus obras más célebres se cuentan: ‘Retrato de Isabel II’ o ‘Doña Amalia de Llano y Dotres, Condesa de Vilches’.

Julio Romero de Torres (1874-1930), simbolismo de los paisajes

Este pintor español  es uno de los más representativos de principios del siglo XX. Lo que más destaca de sus obras es  el simbolismo de los paisajes, la suavidad en la luz y una capacidad asombrosa para crear los escenarios con una atractiva artificiosidad. Su muerte causó conmoción en la Córdoba donde nació ya que su mayor producción la realizó en esta ciudad, y muchos de sus cuadros,  se pueden ver en el Museo Julio Romero de Torres de Córdoba.  Algunos de sus cuadros más emblemáticos son ‘La chiquita piconera’, ‘El retablo del amor’, ‘Naranjas y limones’ o ‘Amor místico y amor profano’.

Juan Gris (1887-1927), pintor e ilustrador

Este pintor nació en Madrid, y se desempeñó en un principio como pintor e ilustrador español. Igualmente, desarrolló su actividad principalmente en París y es considerado uno de los maestros del cubismo. Por lo que,  su obra fue casi toda realizada a principios del siglo XX.  A partir de 1910 cuando comenzó a desarrollar la pintura de estilo cubista, Juan Gris siempre demostró un gran espíritu de innovación y muy radical. Su principal aporte al estilo fue el papier collé, que consiste en incorporar en la obra recortes de revistas o periódicos. Algunas de sus obras más destacadas son: ‘Retrato de Picasso’, ‘Bodegón con persiana’ y ‘Guitarra y Pipa’.

Antoni Tapies (1923-2012), pintor y escultor

Tapies fue un pintor y escultor catalán y en toda su vida como artista se  caracterizó por su estilo personal, siempre consecuente con el expresionismo abstracto, que es una corriente surgida después de la Guerra Mundial. Fue además un artista polifacético y teórico del arte, así como un ferviente defensor de la cultura catalana. Entre sus pinturas más emblemáticas se encuentran: ‘Gran Pintura Gris’, ‘Blanco con signo rojizo’ o ‘Grattage Rojo’.

Joan Miró (1893-1983), gran sensibilidad

Miró ostenta una obra muy variada y destaca en varios estilos tanto del surrealismo, el fauvismo y el expresionismo. Igualmente, Miró ponía a prueba su cuerpo pasando días sin comer para conseguir un estado mental perturbado que le diera inspiración para poder expresar lo que deseaba plasmar en su pinturas. Así mismo, Miró manifiesta el contenido en las formas y  los elementos públicos, a través del hecho plástico donde Joan Miró se muestra como un pintor de gran sensibilidad debido a los acontecimientos políticos y sociales que lo rodean. Por lo tanto, este contraste de fuerzas le llevan a crear un lenguaje único y muy personal, ubicándolo como uno de los artistas más influyentes del siglo XX.

Salvador Dalí (1904-1989), múltiples estilos artísticos

Siendo estudiante de arte en Madrid y Barcelona, Dalí asimiló múltiples estilos artísticos y demuestra una inusual facilidad técnica como pintor. Sin embargo,  dos acontecimientos provocaron el desarrollo y la madurez de su estilo: el descubrimiento de los escritos de Sigmund Freud en el significado erótico de las imágenes del subconsciente y su afiliación con los surrealistas de París, un grupo de artistas y escritores que buscaban establecer la realidad última del subconsciente humano sobre la razón. Por lo que, trayendo las imágenes de su mente subconsciente, Dalí comenzó a inducir estados alucinatorios en sí mismo mediante un proceso que calificó como  paranoico crítico.

Pablo Picasso (1881-1973), pintor más famoso del mundo

Picasso  se considera posiblemente el pintor más famoso del mundo y, el pintor más famoso del siglo XX. Líder del movimiento cubista, abordó otros géneros como el dibujo, el grabado, la ilustración de libros, la escultura, la cerámica, el diseño de escenografía y vestuario para montajes teatrales. considerado uno de los más grandes y más influyentes artistas del siglo XX y el co-creador, junto con Georges Braque, del cubismo. Se le valora como radical en su obra, sin embargo, Picasso continúa ganando reverencia por su dominio técnico, creatividad visionaria y profunda empatía. Estas cualidades le han distinguido al español como poseedor de un ojo de artista transformador. Ya que, por casi 80 de sus 91 años, Picasso se dedicó a una producción artística que supersticiosamente creía sería lo que lo mantendría vivo, contribuyendo significativamente al desarrollo del arte moderno en el siglo XX.

Antonio López (1936-Actualidad), gran vocación por el dibujo

Nació en Tomelloso, Ciudad Real. Se considera uno de los pintores más recientes en la Historia del Arte española,  quien además destaca por su obra como escultor. Por lo que se trata del artista vivo con más proyección internacional actualmente. Desde muy temprana edad, manifestó una gran vocación por el dibujo, terminando dedicado a la pintura. En  sus viajes a Italia, conoció de primera mano la pintura  del Renacimiento, por lo que,  se identifica en el estilo hiperrealista, así como también, se interesó  en la temporalidad y el deterioro de lo material. Actualmente, es miembro de la Real Academia de San Fernando y en 1985 obtuvo el prestigioso Premio Príncipe de Asturias de las Artes. Su obra ha sido adaptada al cine por el director cinematográfico Víctor Erice en el film titulado “El sol del membrillo”.  En el año 2014, realizó la presentación de uno de sus cuadros más ambiciosos, titulado:  La familia de Juan Carlos I, tomándole 20 años la realización de la obra.

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